Parque Natural de Redes, Asturias (8-12 Julio 2008)

Gracias al buen hacer de Angel, los dias pasados en Asturias han sido bien aprovechados. No hemos perdido el tiempo, 5 dias, 5 rutas, a cada cual más bonita. Aquí están sólo tres, pues me reuní con ellos más tarde. Esta es la vista del pueblo de Soto de Agues, nuestro centro de operaciones, desde Ladines.
Victor quiere hacer "puentin"...Vito siempre al quite...


Los peques del grupo.



Los pueblos són especialmente tranquilos y tradicionales.
La primera ruta, del Alba, un derroche de agua...






Segunda ruta.Comenzamos el camino al "Tiatordos" desde Pendones. Nos quedan unos 1200 m. de subidita...yá veremos....si llego!


Después de la "foz", la majada del Plágano y una estupenda fuente.

Lo que llevamos.... y lo que nos queda....!!!!
El último repecho al pico. Dejamos abajo la majada del tiatordos, y al frente, en el centro, el pico del Cantu l´Osu.
Casi en la cima, se corta a plomo la montaña. Debajo el valle de Ponga y al fondo los Picos de Europa.

Es una maravilla .... el tiempo acompaña y nos quedamos un buen rato, comida y siesta incluida!



Del macizo occidental destaca en sombras "Peñasanta de Castilla". No me canso de mirar....
No queremos irnos... pero la niebla nos echa sin preguntar...


Un "recreo" en la majada.

Por fín, el pueblo. Yá es tarde y sin calor se sufren y disfrutan los últimos tramos.
La tercera ruta. Desde el pequeño pueblo de Orlé, salimos para la majada de Melordaña.







Toda la ruta trascurre entre agua y vegetación, por caminos empedrados, pero despues del descanso, comienza la subida por la "foz" de Melordaña, que nos deja sin palabras, literalmente!



Este paso estrecho y empinado, se abre a una majada detenida en el tiempo...ruinosas y en silencio, las cabañas nos cuentan la dureza de tiempos pasados. "Les vaques" nos miran aburridas.




Otra vez la niebla empuja con prisa...



Por esta senda escondida, encontramos una imágen inesperada, padre e hijo, de sólo 9 años, van por unos dias a vigilar sus vacas, a una majada más lejana. Llevan todo sobre sus pequeños caballos que se mueven con mucha soltura por estas sendas tan empinadas. Nos dejan "pasmaos"!El pantano del rio Nalón, en Rio Seco, como un espejo, con las nieblas de la última mañana.
De vuelta al sur, por los puertos de Tarna y las Señales, camino de León, a recordar buenos tiempos. ¡Qué pronto terminan...los días verdes!.













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